Las nuevas tecnologías, el Big Data, los modelos y algoritmos predictivos, así como la automatización de procesos de negocio, están cambiado la forma en que las empresas se relacionan con sus clientes, proveedores y con sus propios trabajadores.
En este contexto, la digitalización ha dejado de ser una opción para convertirse en una obligación para todas las empresas (independientemente de su tamaño) que quieran seguir siendo competitivas. Para ello, es necesario introducir algunos cambios en los diferentes niveles de la organización: